Niacinamida, ácido hialurónico y retinol: ¿qué hace cada uno y cómo saber si los necesitas?

En el mundo del skincare, hay ingredientes que se mencionan tanto que ya parecen parte del vocabulario básico: niacinamida, ácido hialurónico, retinol. Pero más allá de la moda, estos activos tienen propiedades científicamente respaldadas que los convierten en pilares dentro de muchas rutinas de cuidado facial. En este artículo, te explicamos qué hace cada uno, en qué casos conviene usarlos y cómo incorporarlos correctamente.

Niacinamida: el todoterreno que equilibra tu piel

La niacinamida, también conocida como vitamina B3, es uno de los ingredientes más versátiles y bien tolerados del skincare. Ayuda a reducir el enrojecimiento, regula la producción de sebo, mejora la textura de la piel, minimiza la apariencia de los poros y refuerza la barrera cutánea. Además, tiene un efecto calmante y antioxidante, lo que la convierte en una gran aliada para pieles sensibles, grasas o con tendencia al acné.

¿Para quién es?
Ideal para quienes buscan un ingrediente efectivo pero suave, especialmente si tienen brotes, piel opaca o irritada. También es una excelente opción si estás iniciando en el uso de activos.

¿Cómo se usa?
Se puede aplicar tanto en la mañana como en la noche, después de la limpieza y antes de los productos más densos como cremas o aceites. Funciona bien junto con otros activos, como el ácido hialurónico o la vitamina C.

Ácido hialurónico: hidratación real, no solo sensación

El ácido hialurónico es una molécula que se encuentra de forma natural en nuestra piel, y su principal función es atraer y retener el agua. Su capacidad para mantener la hidratación hace que la piel luzca más firme, suave y rellena. A diferencia de lo que se piensa, no engrasa ni tapa poros, por lo que es compatible con todo tipo de piel.

¿Para quién es?
Todas las pieles se benefician del ácido hialurónico, pero es especialmente útil para quienes sienten la piel tirante, con líneas finas o deshidratada, incluso si su piel es grasa.

¿Cómo se usa?
Después de la limpieza, con la piel ligeramente húmeda, aplica unas gotas y sella con una crema para evitar que se evapore. Se puede usar dos veces al día.

Retinol: el ingrediente antiedad por excelencia

El retinol es una forma de vitamina A que estimula la renovación celular y la producción de colágeno. Es conocido por su efectividad en reducir arrugas, manchas, textura irregular y brotes. Es un activo potente y, aunque sus beneficios son muchos, su uso debe ser progresivo para evitar irritaciones.

¿Para quién es?
Quienes buscan tratar signos de la edad, mejorar la textura o combatir el acné persistente. No se recomienda para pieles extremadamente sensibles o si estás embarazada (en ese caso, consulta con tu dermatólogo).

¿Cómo se usa?
Se aplica solo en la noche y se recomienda comenzar con concentraciones bajas, dos o tres veces por semana, e ir aumentando poco a poco según la tolerancia. Siempre debe ir acompañado de protector solar al día siguiente.

¿Se pueden usar juntos?

Sí, pero con estrategia. Por ejemplo, la niacinamida y el ácido hialurónico son seguros y beneficiosos en la misma rutina, ya que hidratan y calman. El retinol, por su potencia, es mejor usarlo por separado o en rutinas nocturnas bien estructuradas. En ese caso, la niacinamida puede ayudar a reducir la irritación que el retinol podría causar.